LA ANTIGUA FRONTERA ORIENTAL DE CASTILLA EN LA MESETA DE REQUENA-UTIEL.

El corral del Somero en el barranco de la Castellana.
En el acta de 1744 una comisión formada por regidores comisarios, el procurador síndico y varios peritos conocedores del terreno, realizaron la revisión de la mojonera fronteriza entre los reinos de Castilla y Valencia. En el acta del Concejo de Requena se refleja la ubicación de un mojón de cal y canto en la esquina de un corral colmenero junto a la rambla de la Castellana. Todavía se conservan las ruinas de ese corral y los restos de la senda de Mijares que también se nombra en el acta.

Alejandro García.

LA ENENIGMÁTICA SIERRA DE LA RÚA EN EL TRATADO DE ALMIZRA Y LA INCORPORACIÓN DEL VALLE DE AYORA A CASTILLA.

En el año 1244 se firmó el tratado de Almizra entre el infante Alfonso, futuro rey Alfonso x, y el rey Jaime I, para intentar solucionar los problemas fronterizos entre las coronas de Castilla y Aragón.
En este tratado se habla de la sierra de la Rúa como limite fronterizo entre los dos reinos. La tierra de Requena conquistada por Fernando III para Castilla en 1238 quedaba al margen de este acuerdo.
Concretamente se citan dos aspectos relevantes en el tratado que nos podrían aclarar donde ubicar la sierra de la Rúa:

- "así como se camina hacia el principio de la sierra de la Rúa que está sobre Ayora".
- "así como dicha sierra de la Rúa está donde muere el río Cabriel en el Júcar".
De este modo la vertiente al poniente de la citada sierra quedaba para Castilla y la vertiente oriental para Aragón. Por lo tanto el valle de Ayora quedaba incorporado a Castilla.
Según lo mencionado en el tratado, la única formación montañosa (sierra) separada hacia el este por la fosa de Sácaras y al oeste por el valle de Ayora, que además arranca justo en la confluencia de los ríos Cabriel y Júcar, prolongandose hacia la villa de Ayora, es el ALTO DE ALCOLA. Si descartamos la muela de Cortes, de geomorfología llana donde no existen vertientes diferenciadas y además no se sitúa sobre Ayora, las posibilidades se reducirían prácticamente a la sierra del alto de Alcola.
Alejandro García.